Herramientas hechas de acero de herramientas para trabajo en caliente
El acero para trabajo en caliente tiene un amplio campo de aplicación. Las herramientas fabricadas con este material se utilizan en numerosas aplicaciones.
El acero para trabajo en caliente se emplea para dar forma a piezas de hierro, metales no férreos y sus aleaciones a altas temperaturas sin que se formen virutas. Se utiliza en procesos como la fundición inyectada, la extrusión y la forja por estampación, así como en la producción de tubos y vidrio. El acero para trabajo en caliente se expone a temperaturas superiores a 200 °C durante su uso, sin que se produzcan cambios estructurales. Por lo tanto, la estructura del material debe ser suficientemente estable y resistente al revenido.
Las herramientas fabricadas con acero para trabajo en caliente están sometidas a cargas térmicas variables, que se producen en las superficies de contacto de la herramienta con el material que se está procesando. Para garantizar su durabilidad, es fundamental que la estructura del acero sea lo suficientemente estable.
La carga térmica, combinada con el desgaste causado por la abrasión o el impacto, requiere propiedades específicas del acero para trabajo en caliente. Entre ellas se encuentran la alta resistencia al revenido, la resistencia a los ciclos de temperatura, la resistencia al calor, la tenacidad térmica y la resistencia al desgaste. El uso de acero para trabajo en caliente de alta calidad es crucial para garantizar una gran eficacia y productividad en las fases posteriores de producción.